Después de varias semanas de ansiedad ante la posible caída de España y Portugal, los mercados se relajaron claramente el 1 de diciembre.

El envío por EE UU del portaaviones nuclear George Washington al mar Amarillo fue un mensaje con doble destinatario, Pyongyang y Pekín.

Casi al mismo tiempo que las filtraciones de Wikileaks revelaban la magnitud del aislamiento político de Irán entre sus vecinos árabes, dos atentados simultáneos en Teherán contra dos de sus más importantes científicos nucleares, demostraron que sus enemigos están pasando de las sanciones económicas al sabotaje y al asesinato de sus responsables.

En las elecciones legislativas egipcias del 28 de noviembre se cumplieron todas las previsiones, con la victoria tan inapelable como fraudulenta del gubernamental Partido Nacional Democrático (PND), que desde su creación en 1978 ha ganado siempre todas las citas electorales con mayorías abrumadoras.

El asalto militar ordenado por el gobernador de Río de Janeiro, Sérgio Cabral, a Complexo de Alemao, una de las favelas más peligrosas de la capital carioca, después de que una oleada de violencia dejara al menos cuatro muertos y 35 vehículos incendiados, ha sido el primer acto de una ofensiva para frenar el “poder paralelo” de las bandas de drogas de Río.