Hoy como ayer, la OTAN sigue centrando su atención en Moscú, percibido como la mayor amenaza a la seguridad continental, aunque con puntuales miradas hacia otros escenarios. El renovado sentido de la Alianza proviene de la necesidad de enfrentar unos de los mayores desafíos de su historia.

La ‘somalización’ de Haití, con bandas criminales controlando grandes zonas de un país a solo dos horas de vuelo de Miami, no ha tardado en afectar a la República Dominicana (RD), que comparte más de un tercio de la isla de Quisqueya (‘madre de todas las tierras’ en taíno) con Haití.

Con menos de tres meses para las elecciones europeas del próximo 6 y 9 de junio, hay una preocupación creciente sobre las maniobras orquestadas por el Kremlin para interferir en la contienda electoral y favorecer los intereses rusos. Una trama detectada por los servicios de inteligencia checos ha desatado las alarmas.

La abstención de EEUU en la última votación del Consejo de Seguridad de la ONU que pidió un cese del fuego en Gaza y las críticas a Benjamin Netanyahu de Chuck Schumer, el senador demócrata por Nueva York, el más firme defensor de Israel en el Capitolio, han hecho indisimulables las fisuras en la ‘relación especial’ entre Washington y el Estado judío.