La inestabilidad geopolítica podría ser el golpe definitivo a la inversión de las multinacionales estadounidenses más al Este de Europa. Prueba de ello son las últimas operaciones de las petroleras Exxon y Chevron, que ante la crisis en Oriente Próximo y el temor a que pueda extenderse, han optado por invertir en Estados Unidos y sus zonas de influencia para asegurar el negocio.

El acuerdo de normalización de relaciones entre Israel y Arabia Saudí iba a ser uno de los legados de la política exterior de Joe Biden junto a la unidad del bloque occidental en la guerra de Ucrania. Tras el ataque de Hamás, todo está en el aire, pero es también una oportunidad de presentarse como un estadista en medio del caos en el bando republicano.

La marcha de la carismática líder del partido de izquierdas Die Linke, Sahra Wagenknecht, para fundar un nuevo partido conservador de izquierdas ha agitado el tablero político alemán. Los planes de la nueva formación pasan por emplear el trampolín de las elecciones europeas de junio de 2024 para propulsar el partido a nivel nacional que rascará importantes cantidades de votos en las formaciones situadas a ambos extremos del arco parlamentario.

Los resultados de la primera vuelta de las elecciones –36,6% de los votos para el candidato peronista y ministro de Economía, Sergio Massa, frente al 30% de Javier Milei– revelaron que aun con una inflación del 150% y el 40% de los argentinos viviendo en la pobreza, el miedo a los cambios radicales puede ser tan –o más– poderoso que la ira.