Dos asuntos situarán Francia en el centro de todos los focos durante el primer semestre de 2022: la presidencia rotatoria del Consejo de la UE y las elecciones. Macron procurará marcar la agenda y asegurarse notoriedad.

Las victorias de Boric, Castillo y Castro vuelven a situar la necesidad de un Estado del bienestar más fuerte en el centro del debate político latinoamericano, marcado por la crisis sanitaria y económica.

Libia permanecerá en el limbo internacional durante tiempo indefinido, sin autoridades legítimas y con la violencia y la precariedad apoderándose de la vida nacional. Mientras, Rusia y Turquía siguen extendiendo sus tentáculos desde el Magreb al Sahel. La OTAN dice sentirse preocupada.

Las fuerzas centrífugas en contra del bloque comercial formado por Estados Unidos, México y Canadá –el 13% del comercio mundial, frente al 14,4% de China– son tan fuertes como los vientos a favor. Entre los segundos, destacan la creciente integración de sus mercados internos y la interconectividad e interdependencia de sus cadenas de suministro. Entre los primeros, las pulsiones proteccionistas.