Sector inmobiliario fuerte, debilidad de los poderes locales, gran marginalidad y construcción informal, factores a tener en cuenta en las políticas urbanas.
Hace unos meses Barcelona acogió el Seminario Internacional “Ciudades mediterráneas: civilización y desarrollo”. Este encuentro fue una buena oportunidad para debatir el proceso de urbanización en Egipto con dos reconocidos expertos en la materia: Dalila El Kerdany, arquitecta y profesora de la Universidad de El Cairo y de la American University of Cairo, y Samir M. Gharib, crítico de arte y director de la Fundación Pública ONHU (Organización Nacional para la Armonía Urbana). De la conversación con estos dos profesionales reconocidos, ella por sus trabajos sobre el patrimonio cultural e histórico y él por la intervención de su organización en la recuperación de valores urbanos y patrimoniales de muchas ciudades de Egipto, y de la experiencia acumulada por quién suscribe el artículo nace la presente reflexión, en torno al sistema de ciudades, la vivienda, la informalidad urbana y las políticas urbanas.
En un momento especialmente transcendental en Egipto, las reivindicaciones de las personas que han invadido las calles y ocupado las plazas –Tahrir como símbolo de todas ellas– están encaminadas principalmente a las demandas de libertad y justicia social. Pero parecen dejar en un segundo plano el derecho a la ciudad. Este elemento es relevante en la medida en que la población egipcia tiene una larga trayectoria de autoorganización de su vida, de sus barrios y de las relaciones sociales…