POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 194

Mapa del estrecho de Malaca en 1874. UNIVERSAL HISTORY ARCHIVE/GETTY

El Sureste Asiático toma el relevo a Oriente Próximo

El centro de gravedad del planeta se reorienta hacia el estrecho de Malaca, nuevo campo de juego de las grandes potencias. Quien lo domine logrará la hegemonía global en el siglo XXI.
JOSEP PIQUÉ
 | 

En una de sus frases célebres, Churchill dijo, refiriéndose a los Balcanes, que tenían más historia que la que podían asumir. Tal frase ha podido aplicarse, trágicamente, a Oriente Próximo. Más en concreto, al pequeñísimo territorio que se disputan Israel y los palestinos y que, en su día, ocuparon los romanos, los árabes, los cruzados, los otomanos y los británicos y que fue el origen primigenio del pueblo judío. Es un lugar donde confluyen lugares sagrados para las tres grandes religiones monoteístas y que ha sido objeto de permanente atención, presencia e injerencia de las grandes potencias. En un sentido más amplio, Oriente Próximo ha sido, en expresión buñueliana, el oscuro objeto de deseo de todas ellas, particularmente en los últimos 100 años.

La explicación es mucho más prosaica que la relativa al espíritu religioso. Cuando la Primera Guerra Mundial tocaba su fin y se preveía la caída del Imperio Otomano, las principales potencias coloniales europeas, Reino Unido y Francia, vencedoras de la contienda (con la inestimable ayuda de Estados Unidos), decidieron en un pacto secreto –los Acuerdos Sykes-Picot– repartirse unilateralmente la región, traicionando las aspiraciones de independencia prometida a los árabes, entre otras iniquidades. Como define el exacto refranero castellano, de aquellos polvos se hicieron estos lodos… Buena parte de los conflictos vividos desde entonces tienen su causa en una división arbitraria entre Estados artificiales, fronteras dibujadas con tiralíneas y áreas de influencia más o menos explícitas. Demasiada arbitrariedad para tanta historia, con sus etnias, religiones, tribus y una complejidad excesiva para ojos occidentales, solo interesados en la dominación.

 

«La relevancia de Oriente Próximo en la redefinición del poder global y de los valores subyacentes empieza a ser inversamente proporcional a su presencia mediática»

 

La propia Guerra Mundial puso de relieve algo que ha marcado la historia…

INICIA SESIÓN PARA SEGUIR LEYENDO