Como los Estados Unidos de finales del siglo XIX, Rusia es tierra de pioneros y foragidos, de oportunidades y fortunas tan colosales como rápidas, pero también de fracasos, estafas y violencia. Para aprovechar su enorme potencial económico, hay que conocer bien sus rasgos específicos: pobreza de recursos naturales, desabastecimiento de la población en alimentos…