Jorge Burón es joven investigador del departamento de análisis económico de la Universidad Autónoma (UAM) de Madrid.

EE UU parece en incipiente expansión. Por el contrario, la UE atraviesa una crisis profunda como unión monetaria y política. El problema no es la economía, sino el modelo productivo y de cooperación europeo, cuya insostenibilidad e incapacidad de recuperación han quedado en evidencia.

Empieza a ser comentario generalizado y bastante fundado, que la resaca de la brutal crisis financiera de 2007, es ya solo un asunto de Europa y, sobre todo, de la zona euro. Solo nosotros seguimos sin crecer. Solo nosotros seguimos con una profunda crisis de consumo y confianza. Solo nosotros tenemos un paro desorbitado y países en situaciones de peligrosa inestabilidad política debido a estas cuestiones. Con el nuevo rumbo de la zona euro, recientemente emprendido, con la política monetaria expansiva y los ajustes menos radicales por bandera, iniciamos un camino que Estados Unidos emprendió hace unos años. Y parecen estar concluyéndolo con éxito, mientras Europa lo inicia, con escepticismo. Quizá este escepticismo nazca de plantearse las siguientes cuestiones ¿Cómo inciden en la economía estas políticas? ¿Por qué le han funcionado a EE UU? Y, por último, ¿la unión económica de la zona euro está suficientemente bien cimentada para que esa inyección monetaria funcione?…