Nadie sabe si de aquí a la próxima CIG de 2004, la UE encontrará la piedra filosofal que le permita prolongar sin límite su vida o, al menos, asegurarse otros cincuenta años de andadura.
Nadie sabe si de aquí a la próxima CIG de 2004, la UE encontrará la piedra filosofal que le permita prolongar sin límite su vida o, al menos, asegurarse otros cincuenta años de andadura.