Un informe del organismo señala que los objetivos de reducción de las emisiones provocarán un desplome del consumo del crudo en las próximas décadas y una desviación de toda esa demanda hacia energías limpias. Las petroleras que no sepan o no quieran hacer esta transición, corren el riesgo de quedarse obsoletas, como ya les ocurrió a muchas empresas tecnológicas de principios de siglo que no se adaptaron a la digitalización.
“La industria del petróleo y el gas llega al momento de la verdad en la COP28 de Dubái [que se celebrará del 30 de noviembre al 12 de diciembre]”, explica la agencia. Según sus cálculos, las empresas de petróleo y gas apenas representaron el 1% de la inversión mundial en transición ecológica. Y, si se compara con su inversión total, las energías limpias apenas se llevaron el 2,5%, unos 20.000 millones de dólares.
Son cifras exiguas para un sector con…