Es responsabilidad de todos aportar soluciones al problema energético. La fusión, con el proyecto ITER en cabeza aparece como una candidata perfecta a convertirse en fuente de energía segura, potente y medioambientalmente aceptable para la generación masiva de electricidad.
esde que el hombre aprendió a dominar el fuego, el progreso humano ha estado íntimamente ligado al control y utilización de fuentes de energía cada vez mas potentes y sofisticadas.
Esta afirmación cualitativa ha sido avalada cuantitativamente por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en su primer Informe sobre Desarrollo Humano1 en el cual introdujo una nueva forma de medir el desarrollo mediante la combinación de indicadores de esperanza de vida, logros educacionales e ingresos en un único Indice de Desarrollo Humano (IDH) que varía entre 0 y 1 (por ejemplo 0,3 para Etiopía y 0,95 para Canada) y que al asociarlo con el consumo eléctrico per cápita de los diferentes países mostró en 20022 la relación existente entre conseguir un índice de bienestar de 0,9, donde están prácticamente todos los países desarrollados, y la barrera de utilización de energía eléctrica anual de 4.000 kilovatios hora (kWh) per cápita.
El problema energético al que se enfrenta el planeta resulta evidente cuando constatamos que los países que están consiguiendo aumentar sustancialmente el desarrollo de su población, son también los más poblados, China o India son buenos ejemplos, y por lo tanto la mejora de sus condiciones humanas está asociada a un aumento significativo de su consumo energético. La mejor prueba experimental de esta afirmación la ofrece China cuyo incremento anual en consumo energético ya en 2007 fue incluso superior al consumo neto de Alemania…