La decisión del gobierno de Canadá de legalizar cuanto antes el cannabis; el reconocimiento del Tribunal Supremo de México del derecho de cualquier ciudadano a cultivar marihuana para su uso personal y la regulación del gobierno colombiano de su uso medicinal, fueron las señales más claras en 2015 del acelerado desmoronamiento del régimen prohibicionista de ciertas drogas en muchas partes del mundo.
En Estados Unidos, a la liberalización casi plena del cannabis para usos médicos y recreativos en Washington y Colorado se han sumado en los últimos meses Alaska, Oregón y Washington DC. En total, 24 Estados la han legalizado para usos medicinales En grandes partes de California las leyes de consumo son tan laxas que equivalen a una legalización de facto. Un 7,5% de la población de EE UU consume cannabis de manera habitual. En Canadá esa cifra es del 24,6%. Todo ello ha hecho absurdas las políticas mexicanas contra un cultivo que genera el 25% de los ingresos –unos 1.500 millones de dólares anuales– de los carteles del narcotráfico, según un informe de la Rand Corporation. En México un 60% de los presos en cárceles federales fueron condenados por delitos relacionados con la marihuana.
La consultora ArcView Group, que conecta a inversores con el negocio legal del cannabis, estima que el sector generó en EE UU ventas por valor de 2.400 millones de dólares en 2014, un 74% más que en 2013 y prevé crecimientos de dos dígitos durante el resto de la década, lo que ha convertido a la industria en la de mayor crecimiento del país. Cuando se generalice el comercio online, el impacto sobre el consumo –incluidos caramelos, cremas y aceites elaborados con derivados del cannabis– será considerable.
Diversas estimaciones prevén un mercado de 25.000 millones de dólares en 2020 dado el rápido crecimiento de…