Su volumen aún está por determinar, pero los nuevos recursos energéticos de Surinam, cuya renta per cápita ronda los 6.000 dólares anuales, transformarán de modo radical su economía.
Guyana podría duplicar o triplicar su PIB en 10 años. ExxonMobil anunció hace poco su enésimo hallazgo de petróleo en la costa, cuyas reservas estimadas superan ya los 5.000 millones de barriles.
Cuando comience la explotación intensiva de esos recursos, el país caribeño podría situarse entre los 10 mayores productores del mundo de crudo en términos per cápita. Surinam y Guyana no son casos aislados en el mundo emergente.
Hace unos meses, BP anunció el mayor descubrimiento de gas natural de 2019, un depósito cerca de la costa de Mauritania, con la energía equivalente a 1.300 millones de barriles de crudo, los suficientes para justificar la creación de un hub de gas natural licuado (GNL) en el país africano.
En el otro extremo del continente, en Mozambique, Total se ha hecho con una participación de 3.900 millones de dólares en un proyecto industrial de GNL cuyo coste total hará palidecer el PIB del país.
Pero no todo son buenas noticias para los recién llegados al club petrolero. La acelerada transición energética para…