El expresidente colombiano Juan Manuel Santos admitió en la reciente Feria del Libro de Guadalajara (México) en un coloquio que la única solución de fondo para el problema de las drogas ilegales era eliminar la prohibición.
Ante la actual cantidad de cocaína de alta pureza (70%) en los mercados europeos, es difícil no estar de acuerdo con el premio Nobel de la Paz de 2016. En Berlín, según el semanario Der Spiegel, los consumidores solo tienen que enviar un mensaje de texto encriptado a un proveedor para poder recibirla a domicilio. En la capital alemana, la cocaína ha superado a la heroína como droga con mayor tasa de mortalidad, que duplicó en 2018 la de 2014. Ese año, solo en Alemania se produjeron 93 muertes por sobredosis de cocaína, cuyo uso durante largo tiempo deteriora el sistema cardiovascular y los vasos sanguíneos cerebrales.
La guerra contra la droga parece perdida desde los campos de cultivo de Putumayo en la Amazonia colombiana y peruana a las calles de Londres, Nueva York, Berlín o Moscú. Según el Sistema Integrado de Monitoreo de Cultivos Ilícitos de Naciones Unidas (Simci), el área con cultivos clandestinos de coca en Colombia alcanzó en 2017 unas 171.000 hectáreas, un aumento del 78% en relación a 2015.
«Entre 2017 y 2018 en 38 ciudades se analizaron aguas residuales para detectar trazas de cocaína; de ellas, 22 registraron aumentos sustanciales de los niveles del alcaloide»
En los puertos de Amberes, Hamburgo y Rotterdam ya se han hecho habituales capturas de hasta 4,5 toneladas. De las 150 toneladas de cocaína incautadas en la UE en 2018, 51 fueron capturadas en Amberes, que tiene la mayor superficie portuaria del mundo, con unos 120 kilómetros cuadrados, por donde circulan unos siete millones de contenedores anuales. De enero a…