Mientras China sigue atrayendo los focos de la economía mundial, en el sureste asiático están surgiendo varias estrellas ascendentes. Entre ellas, destacan Indonesia y Filipinas por su rápido crecimiento, sólidos fundamentos económicos y una tendencia demográfica favorable.
Décadas de rápido crecimiento han convertido Asia en una parte cada vez más importante de la economía global. Tres de las mayores economías mundiales se encuentran en Asia –China, Japón y Corea del Sur–, región que genera en torno a un tercio de la producción mundial y casi la mitad del crecimiento económico reciente. En 2011, China adelantó a Japón como la segunda mayor economía mundial (después de Estados Unidos) y en este momento acumula en torno a un tercio del crecimiento global. En la medida que esta tendencia continúe en el futuro, Asia supondrá en torno al 56 por cien del crecimiento global en la próxima década.
Mientras China sigue atrayendo el grueso de la atención por su tamaño y extraordinarias cifras de crecimiento, en Asia hay otros puntos de luz que no deberían ser pasados por alto. Entre ellos tenemos a las dinámicas economías del sureste asiático, normalmente denominadas Asean 5 (Indonesia, Filipinas, Tailandia, Malaisia y Singapur). Se trata de las cinco mayores economías de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (Asean, por sus siglas en inglés),1 un bloque de 660 millones de habitantes, el 8,8 por cien de la población mundial. Si el bloque Asean fuese un único país, se trataría de la quinta mayor economía mundial y la cuarta de Asia en PIB (en paridad de poder adquisitivo, PPA)…