Geopolitics and Democracy in the Middle East

Hablar de Oriente Medio no resulta nunca una tarea sencilla. Cualquier suceso que acontece en esa región del mundo es inevitablemente sometido a múltiples interpretaciones, muchas de ellas incompatibles y contradictorias. Las llamadas Primaveras Árabes no fueron una excepción. Acogidas en su momento con frío escepticismo por unos y por gran entusiasmo por otros, tras cuatro años podemos concluir que su impulso renovador y democratizante se ha perdido por el camino en casi todos los casos. Sin embargo, esta cadena de acontecimientos, tuvo el efecto de modificar el panorama geopolítico de Oriente Medio y el Magreb. El statu quo mantenido desde los años 90 se ha visto alterado, lo que ha dado pie a una serie de reconfiguraciones regionales que aún están por finalizar.

Este libro aborda la principal problemática presente en Oriente Medio con una solvencia que viene garantizada por la vasta experiencia y la variedad de sus autores. Esta problemática no es otra que la dicotomía entre la geopolítica, entendida como los intereses que tienen diversas potencias en la región (recursos naturales, bases militares, etc.); y la democracia. A través de sus ensayos, se despliega ante nuestros ojos un colorido mosaico de potencias e intereses en conflicto, un microcosmos alimentado por fuegos tales como el nacionalismo, el panarabismo, el imperialismo, el miedo o la simple codicia, que históricamente ha generado y sigue generando un peligroso cóctel de tensiones no del todo contenidas. Los intereses económicos juegan, por supuesto, un importantísimo papel en la situación actual de la región, puesto que los nuevos desafíos a la hegemonía estadounidense por parte de China y las potencias emergentes han intensificado la lucha por los recursos. El problema surge cuando, en este contexto de inestabilidad, se busca fomentar la estabilidad regional (por parte de actores externos comprometidos en la región), sacrificando para ello la democracia y las posibilidades de apertura de diversos regímenes.

Otro factor que tampoco se puede ignorar, y que se trata extensamente en esta obra, es el de las percepciones que los propios actores tienen de las circunstancias, de su papel y de los posibles outcomes derivados de su acción o inacción. Las experiencias pasadas modifican las políticas futuras, y esto es innegable, pero también es cierto que no todas las experiencias son igualmente informativas, y a menudo mirar hacia atrás resulta inadecuado, como en el caso de la actitud de EEUU hacia el conflicto sirio, mediada por sus experiencias negativas en Iraq y Libia.

Los ensayos aquí contenidos nos ayudan a entender, por tanto, una gran cantidad de cuestiones de difícil análisis y más difícil solución. Al finalizar la lectura de este libro no tendremos, por supuesto, las respuestas a los problemas de Oriente Medio. Pero aun así, habremos alcanzado quizá una mayor comprensión de la complejidad del problema.