El conflicto de Irak, lejos de ser un problema local, es la clave del escenario internacional buscado por EE UU, al margen del sistema multilateral. No hay muchas razones para el optimismo.
El conflicto de Irak, lejos de ser un problema local, es la clave del escenario internacional buscado por EE UU, al margen del sistema multilateral. No hay muchas razones para el optimismo.