En 1993 Unión Fenosa empezó a operar en África con un proyecto de mejora de la gestión en la Empresa Nacional de Electricidad de Angola. Desde entonces, la compañía española ha extendido su presencia a Kenia, Suráfrica y Zimbabue, donde participa en la construcción de centrales y cuenta con filiales de ingeniería y consultoría. Las diferencias culturales y en su nivel de desarrollo, junto con la corrupción, son todavía los mayores frenos para la implantación de empresas en estos países.