Cuando se trata de decisiones estratégicas, especialmente en política exterior, Emiratos Árabes Unidos (EAU) a menudo parece ir –y la mayoría de las veces va– “un paso por delante” de los demás. Es una cuestión de liderazgo y una visión del mundo pragmática y orientada a los objetivos. A veces, se trata de decisiones oportunistas. Como la política de EAU está en constante “cambio”, es difícil comprender con exactitud su ritmo. Esto explica por qué muchos países vecinos, entre ellos Arabia Saudí, adoptan a menudo políticas similares después de que EAU haya allanado el camino.
Las implicaciones regionales de la “política de un paso adelante” pueden ser diferentes. Tras 2011, la política exterior de EAU fue asertiva y orientada a lo militar, lo que desencadenó rivalidades y polarización regionales. Desde 2019, la política exterior de EAU ha estado impulsada por la economía, lo que ha reducido las tensiones y fomentado la cooperación regional.
El ejemplo de tres países y tres dinámicas políticas permite analizar los últimos avances de la política exterior emiratí, centrándose en los asuntos en los que EAU parecía ir “un paso por delante” respecto a cuestiones o relaciones que posteriormente se han convertido en tendencias en la región.
Cooperación regional y múltiples alianzas
Emiratos comenzó a replantearse su política exterior a partir de 2019, sobre todo en 2021. Tras una postura regional posterior a 2011 marcada por la asertividad política y el aventurerismo militar (Yemen, Libia), EAU persigue ahora una política exterior orientada a la economía y el comercio, las inversiones y el turismo.
Los Acuerdos de Abraham, firmados con Israel en 2020, encajan en esta etapa política impulsada por la economía. Sin embargo, dichos acuerdos han supuesto un cambio radical de los equilibrios de poder regionales y transregionales, especialmente en términos de seguridad y relaciones…