POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 220

Uno de los mayores retos en materia digital para la Unión Europea va a ser la implementación de manera eficiente por los Estados miembros del Reglamento de Inteligencia Artificial. GETTY

El reto digital de la Unión Europea

La nueva Agenda Estratégica 2024-2029 de la Unión Europea en materia tecnológica y digital no requiere una reforma en profundidad, pero necesita consolidación, madurez, creación y orientarse en cuestiones fundamentales.
Raquel Jorge Ricart
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Desde el discurso de apertura e inauguración del mandato 2019-2024, la nueva presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dejó claro su objetivo de conducir a la Unión Europea hacia una soberanía tecnológica. Si bien se argumenta que la creación de medidas en el ámbito digital fue debida a la pandemia de la COVID-19, la evidencia muestra que las “Orientaciones políticas para la próxima Comisión Europea 2019-2024” de julio de 2019 ya apuntaban tres tendencias que se aceleraron con la crisis sanitaria.

Primero, la creación de normas comunes, como ha sido el caso de los servicios y mercados digitales. Prometió que, durante sus primeros 100 días en el cargo, presentaría propuestas de legislación para un enfoque europeo coordinado sobre las implicaciones éticas y humanas de la inteligencia artificial.

La segunda orientación política se refería a una mayor coordinación entre las instituciones europeas y los Estados miembros, como es el caso del establecimiento de centros europeos de supercomputación de alto rendimiento o el desarrollo de una estrategia común de datos.

La tercera era el aumento de las inversiones en tecnologías estratégicas y críticas, como las tecnologías cuánticas, o la necesidad de desarrollar una nueva estrategia a largo plazo para el futuro industrial de Europa, tal y como se ve en la carta de misión a Margrethe Vestager, vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea.

Mientras que el anterior presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker, había afirmado dirigir una “Comisión política” entre 2014 y 2019, su sucesora, Ursula von der Leyen, se comprometió a dirigir una “Comisión geopolítica”. La operacionalización de esta Comisión geopolítica en el ámbito digital ha tenido sus frutos en algunos ámbitos, si bien en otros todavía se requiere una eficiente estructuración de los procesos de toma de decisiones, una mejora en los mecanismos de coordinación y supervisión…

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