Salir del círculo vicioso del No-Magreb exige una mayor participación de la sociedad civil, que debería imponerse para hacer prevalecer las soluciones locales y dar más fuerza a las iniciativas regionales.
Salir del círculo vicioso del No-Magreb exige una mayor participación de la sociedad civil, que debería imponerse para hacer prevalecer las soluciones locales y dar más fuerza a las iniciativas regionales.