Se aproxima el invierno en el hemisferio norte y, aunque en Panamá eso no signifique frío, sí implica el inicio de la estación seca. Desde mediados de diciembre hasta casi mayo las lluvias se reducen notablemente poniendo en riesgo una de las grandes fuentes de riqueza del país, el Canal. El cambio climático ha mermado las reservas de agua en los grandes lagos que mantienen abierta la puerta entre los océanos Pacífico y Atlántico. Cuando falta agua, las exclusas no pueden funcionar con normalidad y se producen atascos de barcos cargueros. Hasta este año, los atascos eran esporádicos, y se concentraban en momentos de reparaciones en la infraestructura, pero la sequía de 2023 ha obligado a producir cierres incluso durante la temporada de lluvias. En pleno mes de agosto se produjeron picos de más de 200 buques aguardando a cruzar el Canal con un tiempo de espera medio que, en…