El PIB de Nigeria –el 25 por cien del PIB español– es más del doble que el de Guinea Ecuatorial. No es una cuestión de productividad, sino de la importancia del petróleo en la composición de la producción de los dos países. Nigeria es el primer productor de petróleo de África subsahariana y Guinea Ecuatorial, el tercero detrás de Angola. Resultado, el PIB por habitante de Guinea Ecuatorial es 10 veces superior al de Nigeria. También la distribución de sus rentas es dramáticamente desigual. La mayoría de los ciudadanos de los dos países vive en un nivel de subsistencia. En el entorno de los yacimientos de petróleo hay focos de alta tecnología mientras el subdesarrollo neolítico se extiende por zonas rurales y periferias urbanas reflejan las mismas carencias. ¿Qué sucederá si los hidrocarburos se agotan, como empieza a ocurrir en el mar del Norte? Millones de africanos desposeídos de su cultura y sus recursos ofrecerían un riesgo elevado que acabaría convirtiéndose en una apresurada y masiva emigración hacia Europa.
África, dicen los indicadores macroeconómicos, está creciendo como resultado de las nuevas inversiones extranjeras atraídas por los recursos del subsuelo africano. La burbuja se extiende hasta los mecanismos de distribución del comercio. Olán, una compañía líder en alimentación, cultiva tomates en California que exporta a Nigeria en forma de concentrado, donde se procesan y envasan para la venta a consumidores en saquitos de 70 gramos. La venta de concentrados era impensable hace una década. “Hay que mirar lo que está ocurriendo en los campos africanos y actuar en consecuencia”, insiste Albert Roca en este número de ECONOMÍA EXTERIOR.
Aliko Dangote, el número uno en la lista de los nigerianos más ricos, pionero de la telefonía móvil en África, se propone desarrollar manufacturas intensivas en mano de obra e invertir la tendencia recurrente de la dependencia africana en la importación de alimentos y productos industriales. Propone no solo invertir sus ahorros en África, sino estimular a otros capitalistas a seguir su ejemplo para corregir la frustración de un 70 por cien de la población africana menor de 30 años. En efecto, 200 millones de africanos, la mayor población joven…