#25años25libros: autopsia de un imperio

#25años25libros. Mirando hacia atrás, los últimos 25 años aparecen como un periodo que marca el fin de una era. En nuestro 25 aniversario, ofrecemos un repaso por los 25 libros que han ayudado a entender mejor la dinámica de esta transformación y el nuevo mundo que ya está aquí.

El embajador de Estados Unidos en Moscú entre 1987 y 1991, Jack Matlock, recogió en este libro una detallada construcción de la sucesión de acontecimientos que desembocaron, el 25 de diciembre de 1991, en la desaparición de la Unión Soviética. Autopsy on an Empire relata con increíble precisión los detalles alrededor del golpe de Estado contra Mijail Gorbachov en agosto de 1991 en indaga en la verdadera posición de políticos clave del momento, como Boris Yeltsin, Ronald Reagan y George Bush.

Lo más interesante del libro de Matlock es que va más allá de las memorias personales de un diplomático y se hace las preguntas fundamentales: ¿Cómo es posible que caiga un imperio a tal velocidad? ¿Por qué en ese momento y de esa manera? ¿Podría haberse evitado? Sus respuestas están siempre alrededor de las personas, de los líderes del momento y de las decisiones que tomaron, acertadas y equivocadas. Se centra fundamentalmente en la figura de Gorbachov y en las razones que explican por qué el fracaso de su proyecto aperturista resultó en el desmoronamiento de todo el edificio soviético.

Desde su capítulo I, Matlock busca la multitud de causas y el modo en que estas se relacionaron para que la URSS cayera: «Pronto nos dimos cuenta de la enormidad de lo que había sucedido. Esperaba ese resultado, pero también me di cuenta, con todo el conocimiento de la sociedad y de sus políticos y con mi propia participación en algunos de esos sucecos, que no podía explicar con seguridad cómo había sucedido exactamente. Después de todo, la Unión Soviética había poseído la mayor maquinaria militar jamás reunida en el planeta por una sola autoridad política. Había estado gobernada por un partido aparentemente monolítico con instrumentos de coacción sin parangón. Los tentáculos de su elaborada burocracia alcanzaban a cada rendija de las vidas de sus ciudadanos. Su ideología había aparentado tener el secreto para aprovecharse de todas las mareas de la historia. ¿Cómo un Estado semejante podía simplemente haberse destruido así mismo?

«Si me hubieran presionado para dar una respuesta, podría haber dicho de forma fácil que el sistema era inherentemente fallido, condenado a fracasar antes o temprano. Sus líderes habían sido culpables de los crímenes más monstruosos contra la humanidad, y la historia tiene un camino para ajustar las cuentas. El sistema económico era irracional y no podía competir en el mundo moderno. La idelogía había perdido su poder de convicción. El intento de utilizar la fuerza militar para mantener la hegemonía y el «prestigio» se había autodestruido. Y así sucesivamente. Había montones de afirmaciones verosímiles, cada una de las cuales podía contener parte de la respuesta pero niguna realmente explicaba cómo y por qué había sucedido cuando sucedió».