A raíz de la negativa de 12 Estados miembros –en su mayoría nórdicos y del centro y el este de la Unión Europea– a proceder a la reforma de los tratados de la UE, un grupo de seis países ha contraatacado para proponer lo que en los corredores de poder europeo parece evidente: los tiempos vertiginosos que vive el continente a raíz de la invasión rusa de Ucrania meritan una mirada abierta sobre los cambios que Europa necesita.
Un non-paper firmado por Alemania, Bélgica, España, Italia, Luxemburgo y Países Bajos –el documento no lleva el sello de Francia porque el país galo preside actualmente el Consejo Europeo– destaca la oportunidad y la necesidad del actual contexto histórico para avanzar en el desarrollo de la UE. El texto, de dos páginas, no defiende una caprichosa necesidad de reformar los tratados –es evidente que el camino, con referéndums incluidos, presenta serios riesgos–,…