La visita de Blinken a China se ha producido en el punto más bajo en décadas de las relaciones entre Washington y Pekín, con una abierta guerra comercial, tecnológica y geoestratégica desde hace años. Otro de los muchos ejemplos del deterioro de la relación se produjo a finales de mayo, cuando el ministro chino de Defensa, Li Shangfu, rechazó la propuesta de su homólogo estadounidense, Lloyd Austin, para reunirse en Singapur.

Pero según los expertos, podría abrirse un resquicio de distensión. Blinken ha mantenido reuniones con el principal encargado de la política exterior china, Wang Yi, en calidad de director de la oficina de Relaciones Exteriores del Comité Central del Partido Comunista Chino, con el ministro de exteriores, Qin Gang, y con el propio presidente, Xi Jinping. Al viaje de Blinken le antecedió la reunión, alargada durante horas, entre Jake Sullivan, Asesor de Seguridad Nacional, y…