En cuanto se conoció el contundente triunfo del rechazo sobre el apruebo (62% frente a 38%) en el plebiscito constitucional chileno, lo primero que dejó claro el presidente, Gabriel Boric, es que el proceso constituyente sigue abierto. Según Boric, será un “diálogo transversal” entre todas las fuerzas políticas el que deberá trazar una hoja de ruta para darle continuidad. El mandato popular (80% de apoyo) expresado en el referéndum de octubre de 2020 sigue vigente y es irrenunciable, vino a decir el presidente.
Según el presidente del Senado, Álvaro Elizalde, la Constitución actual, heredada el régimen militar, está jurídicamente vigente pero política y socialmente “derogada”. Pero ahora el reparto de cartas es distinto. Nadie previó que el rechazo arrasara como lo hizo, lo que plantea oportunidades, pero también riesgos, sobre todo si la polarización provoca que el periodo constituyente se alargue sine die.
Algunos sectores creen que…