La primera visita oficial a Venezuela del fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, concluyó el 3 de noviembre de la peor manera posible para el régimen de Nicolás Maduro. En un acto en el Palacio de Miraflores en Caracas, Khan anunció que investigará las torturas sistemáticas, desapariciones y más de 5.000 ejecuciones extrajudiciales señaladas en un informe de Naciones Unidas de 2020. Después de tres días en el país, Khan dijo que había pruebas suficientes para pasar de la fase preliminar a una investigación formal, en conformidad con el Estatuto de Roma, que Venezuela ha firmado y ratificado.
Es la primera vez que una nación latinoamericana pasa a la fase de instrucción, algo que Maduro quiso evitar hasta el último momento emprendiendo in extremis una serie de reformas judiciales y excarcelando a presos políticos. No le sirvió de nada. En diciembre, la anterior fiscal, Fatou Bensouda, concluyó…