En los años 60 y 70 el gigante estadounidense de la aviación Boeing creó un eslogan que se popularizó en el país: “If it’s not Boeing, I’m not going” (si no es Boeing, no voy). La compañía fue imbatible durante décadas, dominando la aviación comercial mundial, pero sus días de gloria han acabado finalmente en este inicio de 2024. Uno de sus últimos modelos, el 737 Max 9, sufrió el 5 de enero un aparatoso accidente en un vuelo entre Portland y Ontario en el que se desgajó una de las puertas del fuselaje, arrancando también los reposacabezas de los asientos más próximos.
Por suerte no hubo víctimas mortales, pero Boeing dejó en evidencia, una vez más, los problemas de seguridad de sus aeronaves. El 737 Max ya sufrió otros siniestros en el pasado: en Indonesia en 2018 y en Etiopía en 2019. En esta ocasión, el avión prácticamente acababa…