Tu compra:
#DataméricaGlobal: Chile, más y más cobre
Los datos de la última edición del Índice Elcano de Presencia Global muestran, en general, cómo las economías primario-exportadoras de la región latinoamericana están logrando (o no) capear las consecuencias de la caída del precio de las materias primas en su proyección exterior. Si Perú o República Dominicana refuerzan su sector turístico para responder a los estragos en el sector del oro, ¿cuáles son las opciones de Chile? Es un país con un atractivo que por el momento le sitúa lejos del 46º puesto en el ranking de presencia global en turismo de República Dominicana (con un valor índice en esta variable de 67 puntos en 2015) pero cerca de Perú (53er país en el mismo ranking, con 42 puntos).
Fuente: Real Instituto Elcano, Índice Elcano de Presencia Global
Si el cobre chileno ha impulsado la proyección exterior del país andino, y esto particularmente en los momentos de boom del precio del metal (gráfico 1), cabría esperar el movimiento contrario en la posterior caída. Sin embargo, si bien el crecimiento de la presencia global chilena se ralentiza en los últimos años, esta sigue aumentando en términos absolutos (gráfico 2), mientras otros países de la región la pierden –Argentina, Brasil, Colombia o Venezuela, entre otros–.
Nota: precio del cobre en eje izquierdo y presencia global en eje derecho. Fuente: Comisión Chilena del Cobre y Real Instituto Elcano, Índice Elcano de Presencia Global
¿Por qué? Por una parte, Chile ha logrado revertir la caída de la presencia en bienes primarios con aumentos en otras variables o dimensiones como las inversiones (que pasan del 3,7% de la presencia global de Chile en 2012 al 5%), o la información (del 13,0% al 16,0%) y, muy marginalmente, recurriendo al sector turístico (del 4,2% al 4,7%), lo que lo diferencia de las estrategias peruana y dominicana.
Pero quizás más importante, tal y como explica el Informe Anual de Comercio Exterior de Chile 2014-2015 publicado por el ministerio de Relaciones Exteriores del país, se ha tratado de compensar parcialmente la caída del precio del metal con un aumento de las exportaciones en volumen. Estas eran, en 2014, un 9% superiores a lo que lo fueron en 2011 lo que permitió que, con una caída del precio del 22% en el mismo periodo, la presencia global en bienes primarios descendiera tan solo un 6% entre 2012 y 2015.
