La zona euro supone el quince por cien del PIB mundial, por detrás del 20,5 por cien de EE UU, aunque es la primera potencia comercial en generar el 19,5 por cien de las exportaciones mundiales, frente al quince por cien de EE UU. Pese a esta primacía, el euro no es la moneda más utilizada en las transacciones internacionales. El euro aún tiene que afianzarse como unidad de cuenta en los inicios del siglo XXI.